En el post de hoy vamos a dar un
ligero vistazo a la que posiblemente sea una de las marcas más populares dentro
del mundo del coleccionismo de miniaturas. Por supuesto, me refiero a la casa “Re-ment”.
¿A alguien le apetece un café?
RE-MENT Co., Ltd. (株式会社リーメント Kabushikigaisha-Riiment) es una empresa japonesa que nació
concretamente en Chiyoda (Tokio) allá por el año 1998 y que desde el principio
se centró en una especialización muy específica como fabricante de juguetes de
plástico coleccionables.
La empresa partió en su carrera por hacerse con su propio nicho de
mercado, con la premisa de reinventar la afición del coleccionismo y del
entretenimiento en general. De su espíritu entusiasta y emprendedor surge
precisamente su nombre, ya que “Re-ment” no es otra cosa que la mezcla de dos
palabras que definen su línea de acción: "REform the
entertainMENT" (en castellano “reinventar el entretenimiento/ocio”).
Desde su inicio y hasta el
presente, este fabricante de juguetes nos ha sorprendido con cientos de
colecciones que abarcan diversas temáticas, siendo especialmente recurrentes
dos de ellas: la cocina y la cultura japonesa. Su atractivo sirvió incluso para
que la prestigiosa compañía Kellogg (sí, la de los famosos cereales) se fijara
en su producto y decidera encargarle una colección de pequeñas figuritas que
incluir en sus cajas de cereales destinadas al consumo infantil en varios países.
En realidad, repasando la
trayectoria de Re-ment nos encontramos con varias firmas de peso con las que la
compañía ha hecho colaboraciones importantes, tales como Sanrio (dueña de la
querida, acaudalada y prolífica gatita Hello Kitty) o la todopoderosa Disney. Personajes
como Mickey Mouse, Sailor Moon, My Melody, Rilakkuma o Snoopy ya han inspirado múltiples
miniaturas con el sello Re-ment y han obtenido una gran acogida por parte de
los coleccionistas.
Herramientas de jardinería,
productos de limpieza y de cosmética, material escolar y de oficina, todo tipo
de comidas de todas las partes del mundo, utensilios de repostería, muebles y
electrodomésticos, libros y revistas… Re-ment ofrece todo un paraíso de
posibilidades para los aficionados al montaje de dioramas o para quienes
quieren surtirse de atrezzo para sus sesiones fotográficas con sus muñecas de
escala 1:16. ¡No se les escapa ningún detalle! Y todo está diseñado con mimo y
presentado con gusto. Imposible no encapricharse de alguno de sus sets;
resultan todo un caramelo de tamaño minúsculo y son adictivos.
Me resultaría complicado numerar
todas y cada una de las colecciones y líneas que ha ido lanzando Re-ment al
mercado, aunque sí puedo contaros cuál ha sido mi experiencia personal como
compradora de estas miniaturas. Pese a que encuentro que es un producto bueno
no soy una ferviente coleccionista de Re-ment. Esto no se debe al precio de las
cajas; de hecho son más bien económicas (a excepción de las líneas que fueron
ya retiradas de producción y que son raras de encontrar y de las limitadas). Se
trata de más bien de un asunto de espacio en casa.
En mi breve colección hay un kotatsu (una mesa baja con calefacción
incorporada que fácilmente encontraríamos en cualquier hogar medio nipón), un
juego de té que incluye algunos pastelitos, objetos de oficina y piezas de
fruta. Lo utilizo principalmente para mis fotos, para dotarlas de más detalle
si quiero componer un escenario.
Cuando compramos Re-ment lo
hacemos a ciegas. Todos sus coleccionables vienen en cajas, con una selección
recogida en bolsitas de plástico y están sujetas a diferentes sets o
colecciones, lo que significa que puede darse el caso de que compremos dos
cajitas y resulte que las piezas que vienen dentro estén repetidas. Las miniaturas
del interior son aleatorias y las cajas tienen todas el mismo aspecto por fuera
si están dentro de una misma colección. Así que si queremos completar una línea
entera nos quedan dos opciones: comprarla del tirón (full set) o comprar cada
caja de una en una y buscar a otros coleccionistas con los que intercambiar el
contenido que nos haya salido repetido. Para mí lo ideal sería la segunda
posibilidad, ya que me permitiría compartir la afición con otro coleccionista.
Pero por desgracia este tipo de intercambios no es muy habitual en España.
El embalaje de los Re-ment, como
sucede con la mayoría de los coleccionables de producción japonesa, está lleno
de ilustraciones coloridas y muy cuidado. La verdad es que es todo un gusto
abrir una de estas cajitas y ver qué nos ha tocado. Me recuerda un poco a lo
que sentía de pequeña cuando mis padres me compraban un huevo Kinder. Esa
mezcla de intriga y fantasía es una emoción que se vuelve una delicia en el
caso de las colecciones Re-ment.
Si con todo esto que os he
contado se os ha pasado por la mente probar a coleccionar estas bonitas
miniaturas, os adelantaré que lo más sencillo es buscarlas en Ebay y Etsy.
Algunos usuarios de estas dos plataformas las venden ligeramente rebajadas y
podemos encontrar pequeños tesoros si dedicamos un rato a su búsqueda.
De todos modos, si os apetece
ojear Re-ment desde su fuente original aquí tenéis el enlace a la página web
oficial de la compañía: Página web oficial Re-ment Ltd.
Eso sí, todo el texto está escrito en japonés. Y puede que también encontréis curioso
estos vídeos en Youtube de unboxing de Re-ment y muestras de colecciones:
Espero que os haya gustado esta
reseña. ¡Muchas gracias por leer!
Nota: Las imágenes que aparecen en este post han sido tomadas de la página web oficial de Re-ment y/o del muestreo ofrecido por Google Imágenes en una búsqueda "re ment miniatures". Los vídeos en YouTube cuyos enlaces se ofrecen aquí pertenecen a su autor y dueño del canal.