¡Muy buenas! Hoy os traigo otro custom más. "Salió del horno" hace poquito y forma parte de mi colección de blythes.
Tina lleva desde verano del año pasado en casa. Fue mi pequeño proyecto de las vacaciones de agosto; una pizquita de capricho para seguir perfeccionando la técnica en los customs.
El que os enseño hoy es en realidad su segundo face up (trabajo de cambio de carita: esculpido y maquillaje).
Hacía tanto calor durante esos días de verano y mi pareja y yo teníamos tantas excursiones previstas que al final el custom no quedó como lo había diseñado en mi cabeza. La nena se quedó a medio camino, sin llegar a terminar bien su carving porque la temperatura me agobiaba horrores mientras hacía fuerza con las herramientas.
Lo más incompleto fue desde luego su boca.
Su nombre, Tina, es muy familiar para mi. Así es como mi abuela materna llamaba a mi tía Agustina. Siempre me pareció que sonaba bonito y cariñoso. Aunque esta nena nada tiene que ver con mi tía.
Esta plasticosa tiene un carácter reservado, casi es arisca. Pese a tener un corazón bondadoso es difícil que lo muestre y suele aparentar indiferencia. Esto es: "no hace lo que desea hacer sólo para que los demás no sepan que desea hacerlo".
Habla muy bajito, casi en susurros. Y no le gustan los juegos con grupos grandes. Tina prefiere hacer lo que sea en petit comité.
Entre las cosas que le gustan están: los caballitos de mar, recoger piedras en la orilla de la playa, las canciones tocadas con ukelele, las historias de viajes en el tiempo, ponerse adornos de todo tipo en el pelo, comer rodajas de piña a todas horas y dormirse abrazada a un peluche... ¡Pero no le contéis nada de esto a nadie! Es un secreto. Si ella supiera que os lo he dicho se enfadaría ;-)
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